Hay un país en Sudamérica que tiene uno de los peores sistemas educativos del mundo
En una reunión con amigos gringos entras a la web de Ideo, una de las empresas de diseño más increíbles del mundo, y encuentras que tienen un proyecto en el Perú, Perú Champs. El corazón late de emoción.
Seguro están estudiando el boom de la cocina, piensas. O el misterio de nuestros endiablados ajedrecistas. O a nuestros poetas surrealistas.
Pero no.
Fucking sorpresa. ‘Hay un país en Sudamérica que tiene uno de los peores sistemas educativos del mundo’, dice el video. Luego, claro, te pones triste. Adivina, adivinador.
En los años ochenta y noventa, el terrorismo aniquiló gente y autoestima. El Perú era el país donde la gente se bombardeaba y degollaba mutuamente.
Ahora, en el siglo XXI, somos el país más bruto de Sudamérica. Alguien podría decir: «Pero hay plata. Porque el crecimiento económico. Y el ministro Castilla. Y el PBI. Y la minería. Y los BMWs que circulan en las avenidas».
De acuerdo.
Hay dinero. Pero este factor no nos hace ningún favor. Somos brutos con plata. En el Perú el sistema te maleduca así vayas a un escuela del estado o a una privada. A una universidad en Surco o otra en la zona más extrema de la puna.
¿Será por eso que vivimos entre ingeniosos comecacas, alcaldes macondianos, congresistas que se tiran el sueldo de sus empleados, expresidentes que escriben poemas estrafalarios, periodistas que escriben con las patas, policías que piden coima, rectores de universidad que no leen que y lo demuestran orondos cuando escriben en su Facebook, camionetones que hinchan las pelotas con su cláxon, gente linda que cholea, cholos que cholean, cholos que dejan la basura en la playa, cholos que ponen sogas o paredes en la arena para que los otros cholos no cholifiquen su ya cholificada propiedad, un cardenal que cree que los homosexuales son fuchi y que lo dice durante la misa y días después tiene a medio Perú arrodillándose para escuchar su sermón ignorantón?
¿Será que la mala educación no son solo los exámenes que desaprobamos?
¿Será que la mala educación es lo que hacemos y padecemos y no resolvemos todos los días, antes y después de comer nuestros deliciosos alimentos?
Acá la del loable proyecto Perú Champs (hay que apoyarlo y difundirlo)
