«Todos los que decían que Keiko era una sombra y que Martha Chávez seguía hasta el 2051 deben tragarse sus palabras»
El 17 de diciembre Alberto Fujimori difundió esta carta en la que dejó claro que quería que las caras ‘históricas’ del fujimorismo sigan en Fuerza Popular. Foto: Facebook Alberto Fujimori – Oficial
Escribe Carlos León Moya
Keiko Le Pen se impuso. No postulan Martha Chávez ni Aguinaga ni Luisa María Cuculiza David Bowie. Todos en este baño de cantina llamado Facebook decían que la «prueba máxima» de que Alberto Fujimori era «quien realmente manejaba la campaña» era una carta. Sí, una carta donde decía que de todas forman debían postular sus viejos defensores.
Ya no quedaba ninguna suma y resta por hacer, nada qué esperar. Keiko pondría a Martha Chávez de 1 porque ella no era más que el títere oriental de su viejo. Obvio, él era el jefe. Bien. Keiko dejó fuera a la vieja guardia. Punto. Era lo que quería, y lo consiguió. ¿A cambio de qué? No lo sabemos. Pero no hizo lo que su viejo reclamó.
- Primera tesis: todos los monigotes que, sobándose las uñas contra el saco, dijeron hace 12 días que Keiko era una sombra y que su Api mandaba tanto que Martha Chávez seguiría hasta el 2051, deben ahora tragarse sus palabras y caminar sobre vidrio molido por mantener una misma tesis a pesar de que la evidencia demuestra algo distinto. Pajeros.
- Segunda tesis: a los que digan «no, pero todo eso es montado, el papá hizo una carta y le dijo a Keiko que sería solamente para generar la idea de división en la opinión pública, pero que en verdad seguían tan unidos como siempre y que en 12 días ella debía bajarse a David Bowie y a los Spiders From Mars y todos imaginarían que ella no es un títere cuando en realidad todo había planeado desde el penal un día en que Alberto le dijo a Martha Chávez que la sacrificarían en público pero solo de mentiritas y ella le dijo que no había ningún problema». Decía, a todos los que digan eso, les voy diciendo una cosa: Recontra Pajeros.
Eso es como pensar que las divisiones de la izquierda son totalmente planeadas para dar la impresión de que no nos llevamos bien y somos súper débiles cuando en realidad andamos juntos, no tenemos nada que nos separe, y siempre que nos vemos en La Rocola nos abrazamos y reímos y fingimos que nos partimos y que nos acuchillamos para que nadie sepa que preparamos unidos la toma del poder.-
¿Ya ven? Recontra pajeros.
