ALERTA: En nombre de la inversión privada, pretenden contaminar el aire de todo el Perú
El Ministerio del Ambiente (MINAM) acaba de prepublicar el proyecto de Decreto Supremo que modifica el Estándar de Calidad Ambiental (ECA) para Aire con la finalidad de recoger comentarios y sugerencias de la ciudadanía. Este post es a propósito de ello.
Escribe: Diego Padilla*
Sobre el problema de La Oroya (Junín), hay discusiones más profundas que realizar antes de la propuesta de relajar los estándares de calidad ambiental que ha propuesto el MINAM para promover las inversiones.
La Oroya es una ciudad conformada por comunidades que migraron desde Tarma o Huánuco por el boom minero. Es una ciudad de mineros. Sin embargo, la irresponsabilidad de la actividad, entre el gobierno, la empresa y la misma población, generó que la ciudad sea una de las 10 más contaminadas del planeta.
En La Oroya la esperanza de vida es de alrededor 40 años.
Imagen: aida-americas.org
Centromin manejaba las actividades mineras importantes en la zona, pero en 1997 el complejo metalúrgico La Oroya y la mina Cobrilla pasaron a manos de Doe Run. Uno pensaría que, si el anterior dueño ya tenía problemas de contaminación (Centromin), el nuevo dueño (Doe Run), tendría ello muy en cuenta y sería más cuidadoso.
Pero no, fue peor.
Con todo ello encima, Doe Run empezaba a cerrar operaciones por problemas económicos y la gente se le iba encima porque perdían su trabajo. Desde 2012 no hay operaciones y hace poquito se salieron varios bancos de la zona. Pero entiéndase que la mina nunca ha cerrado en beneficio de la salud humana, sino por motivos económicos: ya no da plata. Ahora la andan vendiendo.
Este año hubo 3 subastas para el complejo metalúrgico La Oroya y la mina Cobrilla. Pero los postores no se presentaban porque las reglas de juego ambientales y laborales eran «muy costosas» y para hacer la actividad rentable se debía relajar el asunto.
De allí que la población haya venido pidiéndole al gobierno que relaje las cosas porque no tienen trabajo. Por eso PPK dijo a la gente de La Oroya que marchen hasta el Congreso. Para que se «haga algo» para vender la mina y reactivar la economía local. Finalmente se está haciendo todo bajo el único objetivo de hacer rentable una actividad que cada vez lo será menos por el contexto internacional (la minería en China).
Complejo metalúrgico de La Oroya. Imagen: SPDA
El MINAM propone bajar los Estándares de Calidad Ambiental (ECA) para que en La Oroya la actividad minera no sea tan cara y se reactive con inversión privada. Esta es una demanda de las autoridades locales y de la población.
Ahora tendríamos una flexibilización ambiental que afectaría la salud humana en todo el país, pero nos daría algo de dinero porque, al parecer, no sabemos hacer nada más.
¿Por qué el gobierno, desde Fujimori, Toledo, Alan, Ollanta hasta PPK no plantearon un modelo de desarrollo local que deje de depender de la minería que cada vez da menos plata pero mata más gente? En esa lógica, eliminemos todas las regulaciones ambientales del país para que vean cómo llega la plata de todo el planeta. Parece que sólo sabemos hacer eso.
Esta es la discusión que también debemos abordar. Recordemos que es la misma población la que ha venido presionando para regulaciones menos flojas. Acá la responsabilidad termina en el MINAM, pero empieza por otro lado. Desde 1997 hemos tenido 20 años para enrumbarnos en otras actividades, pero a nadie le ha importado realmente atender el asunto en Lima, aparentemente.
*Diego Padilla es biólogo de la Universidad Nacional Agraria La Molina y trabajó como consultor en el MINAM.
