El impuesto Odebrecht (o sobre cómo todos los peruanos pagamos a los corruptos cuando pagamos la luz)

Foto: Facebook Diego Trelles Paz

Escribe: Diego Trelles Paz

Antes de explicarles de qué manera los peruanos nos hemos hecho cargo de los sobornos, las coimas y toda la corruptela de Odebrecht desde tiempos inmemoriales, les propongo un ejercicio muy simple:

1. Busquen un recibo de luz.
2. En la factura ubiquen ese rubro en el cobro que dice «AFIANZAMIENTO SEGURIDAD ENERGÉTICA»
3. ¿Saben qué es? Seguro que no pero ustedes (su familia y los vecinos y todos los que tienen luz en el Perú) lo han venido pagando mensualmente. Son de 2 a 3 soles por casa.
4. El «afianzamiento seguridad energética» es el impuesto Odebrecht y, como ustedes saben, Odebrecht es la compañía brasileña que ha tenido que admitir una enorme cantidad de sobornos en varios países para llevar a cabo distintas obras sobrevaloradas de servicio público. Marcelo Odebrecht está preso y acaba de declarar a la justicia estadounidense que tuvo que pagar 29 millones de dólares de sobornos en el Perú.
5. Esos 2 o 3 soles que cada familia peruana paga desde enero 2015, sirven para la construcción del Gasoducto del Sur (es decir, para financiar la construcción del ducto que llevará gas natural a las regiones del sur). Lo curioso es que esta obra ¡está paralizada desde hace meses! y, sin embargo, todo los peruanos seguimos pagando el oculto «impuesto Odebrecht» en nuestros recibos de luz.

En el Gasoducto Sur Peruano (GSP) ya se han invertido cerca de US$ 1.500 millones y tiene un avance del 31%.

Imagino que saben quién «ganó» el derecho a la construcción del GSP, ¿verdad?

Exacto: Odebrecht. ¿Cómo la ganó? De forma fraudulenta: de los 29 millones de dólares que invirtió Odebrecht para sobornar a un montón de gente inescrupulosa en el Perú, solo en este trabajito, Odebrecht tenía asegurados ¡9 MIL MILLONES DE DÓLARES en 30 años!

¿Saben quién paga y pagará esos 9 mil millones de dólares? Yo, usted, el vecino, sus hijos… TODOS los peruanos. El GSP está paralizado porque un Odebrecht desplomado por la inmensa corrupción desplegada en toda la región, está buscando socios que le compren las acciones de una licitación que obtuvo coimeando. Y mientras estos corruptos buscan quién les compre las acciones, nosotros seguimos pagando y alimentando ese monstruo que el presidente PPK no desea combatir porque, para PPK, Odebrecht, que ha admitido el soborno, nos puede demandar si lo sacamos del país.

Yo solo quiero hacerles dos preguntas que me intrigan profundamente:

• ¿Por qué en esta red mucha de la misma gente que está indignadísima y hace un verdadero escándalo cuando le ensucian la playa pública o se bañan en la pileta pública, se queda callada cuando le están robando tan impunemente?
• ¿Qué pasó en el Perú, qué pasó con nosotros para que esto de que nos roben ya no sea noticia en los periódicos y, como en la dictadura, haya periodistas pagados por las mismas empresas coimeras para no informar nada?

Este escándalo solo revela la insondable masa de podredumbre en la que se ha convertido este país donde los corruptos ya no son solo los políticos. ¿Qué hacemos entonces? ¿Les regalamos el país? ¿Seguimos pagándole de nuestro bolsillo a los corruptos para que se sigan enriqueciendo con sobornos mientras joden más al Perú? ¿Qué falta para reaccionar si el mismo presidente no quiere resolver nada e incluso aboga para que Odebrecht siga aquí?

¿Qué más falta carajo?